Carmen Muñoz Ballester era usuaria de gafas y lentillas. Dependía de ellas en el día a día y su mayor problema venía a la hora de ir a la playa o a la piscina. Por eso acudió a Quijada | Medicina Ocular, son el deseo de corregir su visión. Su anhelo fue posible gracias a la técnica ICL.
«Solía ir siempre con lentillas o era incapaz de ver nada. Lo peor era ira a la playa o a la piscina»
Aunque no dejó que la miopía limitara sus actividades «tenía problemas nadando».
Tras la operación espera poder viajar sin preocuparse por líquidos de lentillas ni gafas.
«Seguramente viajar sin preocuparme por gotas o gafas sea un gran cambio en mi vida»
Se decidió a acudir a Quijada | Medicina Ocular aconsejada por una amiga que ya se olvidó de las gafas con nosotros y animada por su marido.
La intervención fue completamente indolora.
«El primer ojo fue completamente indoloro. En el segundo fue molesto, pero sin dolor»
Carmen también está satisfecha con el postoperatorio, que fue «indoloro, cómodo y sin complicaciones«.
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